domingo, 6 de abril de 2008

Adiós y muy buenas

Este blog se termina.
LLevo sin escribir mucho tiempo y realmente...ni me apetece.
Mis más sinceras disculpas a la dueña del blog puesto que era para ella y no ha resultado tener éxito.
Pero, en verdad, da igual.
Ella seguirá recibiendo extraños emails
que cuenten historias magníficas, divertidas;
que hablen de lágrimas ardientes, y de otras hirientes.
Seguirá recibiendo mensajes de amor
que irán a parar directos a su corazón.
Continuará riéndose a carcajadas
ante la pantalla del ordenador;
llorando de la risa, aunque veces de dolor;
leyendo emails sinceros
escritos desde el fondo de mi corazón.

No la olvidaré nunca, la amistad que me da ella
muchas veces me da la vida, me dibuja la sonrisa.
Hay cosas que debería contarla sobre mí,
y, a veces, se las querría decir.
Pero me falta el aire,
me falta la paz,
me falta la fuerza,
me lanzaría al mar.
Se me cierra la garganta y me pica la nariz.
Las palabras se evaporan ahogadas;
no quiero fingir, tampoco mentir.

El pasado es pasado, y ahí se queda.
No vale la pena darse la vuelta,
ni buscarlo en el presente.
Sepultarlo es lo que mejor sienta.

Seguirás formando parte de mi vida.
Si miras al cielo nocturno, inmenso,
busca mi estrella, siempre en vigilia.
Mi padre la colocó colgada de una sonrisa.
Ella sigue mi estela y os envía mis noticias.